jueves, 25 de noviembre de 2010

El Peregrino I

Consideraciones previas a tener en cuenta para una mejor comprensión de siguientes entradas relativas a un viaje a Tierra Santa. Se trata de conceptualizar algunos términos para que todos entendamos lo mismo. Vale pues.
Peregrino: pringado de turno al que se le pasea aborregadamente por las tierras de jesucristo. No anda. Casi corre. No tiene tiempo de ver nada ni de hacer fotografías. Pinglanillo en la oreja para escuchar las explicaciones del guía y gorra cutrilla de agencia de viajes a juego para cohesionar el grupo.
Guia: persona de perfil mameluco metida a fraile franciscano que interpreta de forma incansable histórias inverosímiles de la bíblia mientras practica la marcha atlética al frente del grupo de peregrinos.
Autocar: vehículo a motor que desplaza peregrinos de un lugar a otro y dentro del cual se aprovecha el tiempo con padrenuestros, avemarías, salves, cánticos, oraciones, plegarias y lecturas de salmos a dos bandas (párrafo para el lado derecho, párrafo para el lado izquierdo y alternando).
Hotel: Establecimiento turístico que alberga a peregrinos. Lugar donde se llega a las seis de la tarde para ducharse y demás necesidades fisiológicas. Se cena a las siete. A continuación te reunes en la cafetería para degustar un té mientras se comenta y despotrica con lo acontecido este día. Te vas a dormir a las diez porque te despertarán a las seis de la mañana y te darán de desayunar a las siete porque hay que salir a peregrinar a las ocho.
Lugar de interés turístico: dícese de cualquier piedra, roca, gruta, cueva, tumba, manantial, árbol, resto arqueológico o placa conmemorativa donde se ha construido una basílica para que el peregrino pueda asistir a la eucaristía (misa cantada)con todo lo que esto conlleva de sermones, salmos, cánticos, oraciones, meditaciones, padrenuestros, avemarías, salves, lecturas bíblicas y todo eso.
Chófer de autocar: palestino al que le han expropiado su tierra y no le han pagado. Que habla varios idiomas. Que cobra un sueldo rídículo y que para sobrevivir practica la venta ambulante como botellas de agua, bíblias, libros bíblicos varios, rosarios y cualquier cosa de interés para un buen peregrino.
Turista ateo tuneado a peregrino: persona que no se cree nada de temas religiosos, ni de los personajes que aparecen ni de las cosas que se cuentan y que supuestamente han pasado. Que para hacer turismo como dios manda se escaquea tanto como puede del guía y de sus rutas y así tiene tiempo de admirar todo lo que encuentra a su paso al margen de explicaciones surrealistas.
Con estas explicaciones queda cimentada la base de las futuras entradas relacinadas con el viaje y así poder abreviar y no tener que repetirme. Sólo mencionar alguna de las palabras claves el lector tendrá un verdadero conocimiento de lo que aconteció en este viaje. Salud.