domingo, 1 de marzo de 2015

Cruzar

Cruzar la calle hasta el otro lado
cruzar la vida con sus horas y días
con sus miedos y sus valentías
cruzar el bosque y el mar.
 
Al otro lado la acera es igual
la vida es la misma
 pero puedes caminar de otra forma
o vivir de otra manera.
Después de cruzar
las pasiones de juventud
son dependencias de madurez.
 
Huir de no estar solo
ni desnudo ni ausente
si el primer rayo de sol me ciega
no podré ver el amanecer.
 
Busco por todas partes las horas vividas
y las noches que me quedan.
Me estarán esperando en el infierno
 o entre olas de un largo atardecer
quizás las encuentre al otro lado
después de cruzar.
 
Vivir con delicadeza conquistando el olvido
después de cruzar la calle y las horas de la vida.
Necesitaré la memoria para vivir con experiencia.
 
Envejecer de forma solemne igual que naces y vives
antes de cruzar la calle, antes de cruzar las horas
antes de cruzar la vida.